La fertilización es un proceso fundamental para mantener los olivos jóvenes en buenas condiciones
Cuando llega el comienzo de la primavera, toca pensar en los cuidados que necesitan los olivares, más aún si se trata de olivos jóvenes. Y es que en todo plan de cultivo se deben incluir etapas concretas de cuidados, como son la poda, los injertos, la cosecha… y la fertilización. En olivar se suele comenzar a realizar el abonado a la salida del reposo, cuando la savia de los árboles comienza a movilizarse (aproximadamente en el mes de marzo), y dura hasta septiembre más o menos, ya esperando la cosecha (dependiendo de cada caso).
¿Qué debemos saber para elaborar un plan de abonado?
El olivo es una especie típicamente mediterránea adaptada al clima de la zona. Se trata de una especie presente en los paisajes de la península ibérica como un elemento más de los ecosistemas mediterráneos y de la cultura. Aunque es una especie rústica presenta también una serie de requisitos que limitan su área de distribución preferentemente a zonas de clima mediterráneo.
Es sensible a las heladas, si bien puede soportar temperaturas hasta -10 °C, aunque la resistencia al frío es una característica varietal. Las altas temperaturas son perjudiciales, sobre todo durante el periodo de floración.
Y aunque se encuentran olivos en muy variadas zonas, parece desarrollarse mejor en áreas con una pluviometría comprendida entre los 600-800 mm/año. Por eso, debemos conocer bien la composición del suelo y el clima al que se van a enfrentar nuestros olivos, para poder elaborar un buen plan de fertilización.
¿Cuáles son los enemigos principales de los olivos?
Hay varios insectos que lo atacan: la Psilla o pulga del olivo y la cochinilla, que chupan la savia de esta planta (la Psilla se posa alrededor de los peciolos de las hojas y de los pedúnculos florales).
La llamada mosca del olivo deposita sus huevos en los frutos cuando estos son aún pequeños, ya la larva, con su voracidad, come la pulpa de las olivas; a veces una misma oliva contiene varias larvas.
Otro insecto nocivo, pero no tan corriente, es la cantárida, que ataca los tallos tiernos y malogra la cosecha futura. La Psilla es de tamaño muy pequeño y difícil de destruir; la cochinilla se puede destruir frotando las ramas del olivo atacado con trapos empapados en vinagre o lechada de cal; contra el gusano de la aceituna dan buen resultado las soluciones de arseniato de plomo; las cantáridas pueden ser recogidas en las primeras horas del día, pues entonces están como atontadas y, sacudiendo las ramas del olivo, aquellos insectos caen al suelo, recogiéndose en grandes lienzos que se extienden previamente debajo del árbol.
Los olivos sufren también diversas enfermedades parasitarias; así, el moho amarillo o verdoso y la negrura; el moho se desarrolla en los olivares plantados en terrenos excesivamente húmedos, y para combatir la enfermedad hay que desecar el terreno; la negrura aparece en olivos con ramaje excesivamente espeso, que priva a las olivas de recibir ampliamente el sol y el aire; para combatir esta enfermedad hay que podar adecuadamente el olivo, haciendo que entren ampliante, en el espesor de su ramaje, el aire y el sol.
Para llegar a este porte es necesario un plan de abonado desde que los olivos son jóvenes.
Plan de abonado para olivos jóvenes
Independientemente que el cultivo de los olivos sea en fertirrigación o secano, proponemos un plan de abonado con los siguientes productos para tus olivos jóvenes. Presta atención al plan de abonado perfecto para los olivos, porque la clave también radica en su dosificación y época de aplicación:
Sembralia N3O - Fertilizante líquido nitrogenado
- Favorece los procesos de floración y polinización del cultivo (producción y calidad del polen, elongación del tubo polínico, fecundación).
- Mejora el proceso de cuaje y amarre de frutos, así como el crecimiento y engorde de los mismos, así como de tubérculos.
- Su contenido en aminoácidos supone un ahorro energético para el metabolismo vegetal y potencia la absorción del fósforo y molibdeno.
Abono NK 3-31
El abono NK 3-31 es un fitonutriente indicado para la prevención y corrección de las carencias de potasio y para favorecer una óptima maduración y alcance de calidad de los frutos. Contiene en su formulación EDTA libre, que proporciona una mejor absorción del potasio por vía foliar.
Modo de empleo: de 3 a 5 aplicaciones durante la fase de engorde y maduración (y, luego, de julio a septiembre cada 15 días). En caso de mezclas con productos fitosanitarios sensibles al fenómeno de hidrólisis alcalina, se recomienda acidificar el caldo de aplicación hasta alcanzar un pH neutro o ligeramente ácido antes de la adición de este producto.
- Foliar: 300 cc/hL. Cuando se utilicen agua de pH básico, añadir antes al caldo 250 cc de Spray pH Ideal por 1.000L de agua con el fin de obtener un caldo aproximado de pH 6-7
- Riego localizado: 2 L/ha
POTASA - Sembralia K22
La fertilización potásica (por vía foliar o por fertirriego) es necesario en los olivos jóvenes (y en todos) para que la planta madure el fruto de forma óptima, ya que el potasio es crucial en este proceso. Sembralia K22 (MAX ENGORDE) presenta una fórmula desarrollada específicamente para su aplicación en olivares, ya sea a través del riego o mediante aplicación foliar. Su principal ventaja radica en promover el engorde y maduración de los frutos, mejorando además el aspecto y la calidad de las aceitunas.
Por último, como sabéis, en Sembralia tenemos un amplio catálogo de productos para fertilización de olivar donde existe un gran abanico de posibilidades. Además, os recordamos que tenemos a disposición de nuestros clientes un servicio gratuito de asesoramiento, mediante el cual el equipo de ingenieros agrónomos responderá a todas las preguntas que planteen relacionadas con la agronomía. Simplemente envíanos un mensaje de WhatsApp, o ponte en contacto con nosotros por correo, para enviar tu consulta.