Los retos de la agricultura del siglo XXI pasan por la gestión de los recursos, digitalizar el entorno rural, y agilizar las políticas comunitarias (y la aplicación de la PAC). Estas son las principales conclusiones de la mesa redonda titulada "Sembrando el Mañana", organizada por Corteva, junto a Eltiempo.es y expertos del sector.
Este artículo explora el impacto de la Nueva PAC (Política Agrícola Común) en el cultivo de proteaginosas en España. Se examinan las oportunidades y desafíos que la política trae para los agricultores de proteaginosas, y cómo la Nueva PAC está modelando el futuro de la agricultura española hacia un enfoque más sostenible y ecológico.
Las políticas en materia agrícola se deben actualizar conforme se desarrollan nuevos productos. Este es el caso de los bioestimulantes, que son insumos agrícolas de nueva generación que potencian los efectos de otros insumos (como los fertilizantes).
Gracias a la Política Agraria Común (PAC), España recibirá 47.724 millones de euros entre los años 2023 y 2027. De esta manera, se convierte en el tercer país más beneficiado, por detrás de Francia y de Alemania. Según el Ministerio de Agriculturas, los agricultores percibirán 7.150 millones de euros anuales.
El nuevo panorama socioeconómico y la preocupación por el medio ambiente están llevando a la Unión Europea a adoptar nuevas políticas enfocadas en la sostenibilidad de la población y del territorio. Tanto es así, que el 11 de diciembre de 2019 la Comisión Europea adoptó el Pacto Verde Europeo.
Los pagos directos de la PAC constituyen alrededor del 90% de los pagos totales anuales del Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA) y suponen una garantía de renta para los más de 695.000 agricultores que han presentado en el año 2019 su solicitud de ayuda.